Desde que era pequeño por el ambiente mismo en cual crecí, fui un apasionado por la pintura y por la cosmética de los vehículos; por ese entonces llegaba con bastante frecuencia la muy querida y recordada revista Mecánica Popular, donde muchas veces Dupont, describía paso a paso como lograr un acabado perfecto.  Fueron épocas maravillosas donde resaltaban el Ford Mercury Coupe, el Chevy Bel Air, el Studebaker, el Chevrolet Impala, el Ford Fairline y el Thunderbird, por ese entonces sin lugar a dudas con tanta belleza y tanto cromo; nació el detailing, en los lugares donde solo se le conocía como CarWash, el lugar preferido para la limpieza del vehículo. 

El detailing es el conjunto de técnicas y procesos destinados a la limpieza, rejuvenecimiento y protección de las distintas superficies de un vehículo las cuales marcan la gran diferencia que existe entre una simple limpieza y un verdadero resultado “Show Car”

Las técnicas del detailing las aprendí en la ciudad de Houston Texas, cuando un día estaba alojado en el Hotel Galleria, vi con asombro desde mi cuarto – lo que solo conocía por la revista –  como en la parte de atrás de este hotel se efectuaba el detailing,  para los vehículos de los huespedes del hotel,  era algo espectacular, en el Perú siempre habíamos pulido a mano; posteriormente me interese tanto esta técnica que me llevo a San Antonio Texas, para ver las grandes competencias de Auto Detail y posteriormente al NACE, NADA, SEMA, APEX, AUTOMECHANICK, etc.

Con bastante conocimiento de estas técnicas,   abrimos las puertas al público en el año 1986, como Detail Plus, en la esquina de Guardia Civil y Parque Sur, y desde ese entonces, hemos tenido la oportunidad de realizar el detailing exterior a infinidad de vehículos; logrando resultados impresionantes para la época; por este motivo  es grato recordar mi primera herramienta orbital de 16Lb de peso con sus motas de toalla y felpa,  esta pesada herramienta, trabajaba  a 1700 rpm y era tan delicada como la mano de uno mismo, incapaz de dañar o dejar el “swirl mark” (Marcas tipo remolino) en la pintura; también recuerdo con mucho cariño  a mi fabulosa máquina para  lavado de alfombras y tapiz, la Thermax CP5, y a  mi Paasche para mis trabajos de touch up(Retoque); han pasado  más de 30 años desde aquel entonces”.

César Peñaranda